Pues sí. Muchas veces no sabemos qué hacer cuando viene
gente a casa. Queremos quedar bien pero, por otro lado, nos da taaaanto
trabajo. A mí me encanta cocinar, pero a veces es un pelín estresante. Yo no sé cómo mi madre, con todos los que
somos, se las apaña par que todos los platos salgan a la vez y todos con la
temperatura perfecta.
Así que para mí, que no sé cocinar tanto ni tan bien, lo
importante es preparar platos que se puedan dejar hechos “o casi” bien por la
mañana o el día antes, y así evitas estar agobiada hasta que llegan los
invitados o arriesgarte a llegar tarde. Importante, freir lo menos posible el mismo día (si puedes no freir, mejor, jeje).
Por eso esta idea me ha parecido buenísima. La vi en una web
que se llama Petitchef, que cada día te envía un primero, un segundo y un
postre bastante fáciles. Lo que es en diseño y demás es un poco “cutre” pero te
da ideas buenísimas.
Y dicho todo esto, no me enrollo más, y voy al plato.
INGREDIENTES:
- 1 berenjena
- 1 calabacín (en la receta
original sólo lo hacían con berenjenas, pero ahora tengo muchos calabacines y
les tengo que dar salida para que no se me pongan malos)
- ½ vaso de pan
rallado
- ½ vaso de queso
rallado
- pimienta molida
- ajo en polvo
- mayonesa
- En la receta también ponía
que se echara perejil picado, pero a mí se me olvidó :-O
PASOS A SEGUIR:
- Mezclar el pan rallado, el queso rallado, la pimienta molida
y el ajo en polvo. reservar
- Lavar y cortar la berenjena y el calabacín
- Huntarle mayonesa por las dos caras
- Rebozarlo con la mezcla anterior
- Ponerlo sobre una bandeja y al horno durante unos 10-15 minutos.
Si está precalentado antes, se hará en poco tiempo.
Cuanto más tiempo lo dejéis en el horno, más crujientes
quedarán. Y recién hecho más. Si los dejas para el día siguiente se quedarán
más blandos pero siguen igual de ricos. ¡¡Riquísimos!!
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