En los últimos meses muchos blogs
que sigo han estado hablando de un parque que yo desconocía. Se trata de La
Quinta de Los Molinos. Está en Madrid y nunca había oído hablar de él pero, de
repente, lo leía por todas partes. Así que decidí que habría que ir a comprobar
si lo que se contaba era cierto.
El motivo de tanto protagonismo
es que se trata de un parque repleto de almendros que con la llegada del buen
tiempo empiezan a florecer y se pone precioso. Es la mejor época para visitar
el parque, aunque cualquier momento es bueno, ya que es muy grande y es un buen lugar para ir en bici, con niños y
llevarse un picnic y comer allí mismo.
Pero es cierto que durante la
floración de los almendros la vista merece muchísimo la pena. Tiene unos 6000,
que se encuentran divididos en tres zonas. Si entras por la puerta de la calle Alcalá las puedes ver: una nada más entrar a la derecha,
otra en este mismo lado un poco más adelante, y la que más me gustó, al final
del todo a la izquierda. Es la más amplia y la vista impresiona más.
Siempre que florecen significa
que se acerca el buen tiempo, así que no dejéis de visitarlo el año que viene porque
es todo un espectáculo.
Tiene cinco entradas. Yo os
recomiendo la de la calle Alcalá, ya que el metro Suanzes (línea 5) tiene una
salida justo en la puerta. Y si os apetece pasar allí todo el día, enfrente hay
un bar cafetería que se llama Sanpas con menú del día económico, raciones y bocadillos por si prefieres comer en
el propio parque. ¡¡Merece la pena!!
La Quinta de Los
Molinos
Horario:
todos los días de 6:30 a 22:00 hrs.
Dirección: C/ de Alcalá, 527, Madrid.
Dirección: C/ de Alcalá, 527, Madrid.
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