Albóndigas. Un plato rico que siempre gusta

Hoy traigo un clásico. Seguro que muchos ya sabéis hacerlas, pero para los inexpertos, os traigo otra receta de mi madre que, una vez hecha, no es tan complicada. Requiere más tiempo que otras recetas que suelo poner, pero las albóndigas son un imprescindible en el recetario.

Allá voy:

INGREDIENTES PARA LAS ALBÓNDIGAS:

- 300 grs. de carne picada

- 2 huevos

- 1 ajo picado

- Nuez Moscada

- Perejil

- Sal

- Harina

- Algo de pan rallado (opcional)

INGREDIENTES PARA LA SALSA:

- ½ cebolla

- 1 zanahoria

- ½ pimiento verde

- 1 tomate natural

- harina

- agua

- ½ vaso de vino blanco

PASOS A SEGUIR:

- En un bol poner la carne, el huevo sin batir, el ajo picado, un poco de nuez moscada, un poco de perejil y sal. Mezclarlo todo con las manos.

- Hacer bolas y rebozar. Esto es, en un plato hondo poner harina y en otro, batir el huevo. Cogeremos las bolas de carne picada, las pasaremos por la harina (sacudir un poco para que pierda el exceso) y luego por el huevo. A continuación, freír en abundante aceite ya caliente.

TRUCO. Si ves que no te manejas bien con la carne picada porque se te escurre, echar un poco de pan rallado. Pero no abusar porque si no, se queda apelmazado.

- Una vez fritas, sacar y colocar en una cacerola.

- Reservar el aceite.

- Para hacer la salsa:

- Trocear la zanahoria, la cebolla y el pimiento. Echarlo en el aceite en el que hemos frito las albóndigas.

CONSEJO: Quitar parte del aceite. Para esto no hace falta tanto como para las albóndigas. Si lo dejamos todo quedará muy aceitoso. Mejor dejar sólo lo necesario en la sartén.

- Añadir el tomate a trozos.

- Echar una cucharada o dos de harina para que sea más denso.

- Una vez hecho el sofrito, echarlo en la jarra de la batidora. Añadir el vino blanco y un poco de agua. Batirlo todo bien.

- Ya triturada la salsa, añadirla a la cacerola donde hemos puesto las albóndigas. Calentarlo todo junto y servir.

TRUCO: Si queremos que la salsa sea de un tono más rojizo, añadiremos tomate frito.

Pues ya tenemos nuestras albóndigas. Si les añadimos unas patatas fritas son un plato perfecto y riquísimo.

Al tener que rebozar ensucia más que otras recetas que he puesto por aquí pero alguna vez habrá que hacerlo ¿no?

Ahora ¡¡a comer!!

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